México.- Con el Telescopio Saint-Ex del Observatorio Astronómico Nacional de San Pedro Mártir, en Baja California, “buscamos exoplanetas que tengan características” semejantes a la Tierra, donde existe la única vida conocida hasta ahora, reveló la doctora Yilen Gómez Maqueo Chew, en el Ciclo de conferencias: Lunes en la ciencia, organizado por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
La académica del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de de México (UNAM) detalló que se trata de un dispositivo único en el país, dedicado al estudio de los planetas extrasolares y que consiste en una montura ecuatorial, un espejo primario de un metro de diámetro y una cámara muy sensible que ayuda a medir la luz de las estrellas para ver el tiempo y rastrear su caída de luz.
En el proyecto Antoine de Saint-Exupéry, autor de El Principito, colaboran el doctor canadiense James Peebles, Premio Nobel de Física 2019, entre otros investigadores, así como estudiantes de la UAM, la UNAM y universidades de Suiza, Bélgica y Gran Bretaña.
“Desde el Parque Nacional trabajamos en la exploración de exoplanetas que tengan una superficie y continentes como la Tierra, además de presión y temperatura, de tal forma que se pueda mantener el agua líquida, pues son las condiciones que darían lugar a una vida como la de nosotros”, explicó durante la plática A la búsqueda de nuevos mundos desde el Observatorio Astronómico de San Pedro Mártir.
“Mientras más sitios de este tipo conozcamos, entre más sepamos de ellos veremos más posibilidades, pero la vida hasta ahora es la que conocemos aquí y seguiremos buscando algo similar”.
Los llamados exoplanetas o planetas extrasolares orbitan alrededor de otras estrellas que no son el Sol y se conocen ya cuatro mil 404, derivado de las observaciones de los últimos 15 años, a partir del descubrimiento del primero, el 51 Pegasi b, en 1995, por el suizo Didier Queloz y por el que se sabe que existen y han continuado los hallazgos.
“James Peebles –Premio Nobel de Física 2019, junto con otros dos científicos– revolucionó la idea que teníamos sobre la creación de los sistemas planetarios. Con sus aportaciones desarrollamos la teoría de explicar un planeta gaseoso tan cerca de su estrella y fundó una nueva rama de la astronomía exoplanetaria ampliando el estudio que antes era el Sistema Solar”.
Antoine de Saint-Exupéry “busca planetas transitantes alrededor de las llamadas enanas ultrafrías –las más pequeñas y con menos masa que existen en nuestra galaxia– para localizar sistemas planetarios y hasta ahora se han detectado siete de tamaño terrestre”. Los planetas pequeños o terrestres son fáciles de detectar ya que estarían en orbitas más cercana y la caída de luz sería más grande.
También “sabemos que hay más planetas cercanos alrededor de las estrellas M que de las de tipo solar y podemos tener una idea que es 3.5 veces más probable que una estrella M tenga un planeta pequeño que una como el sol”.
Además, “nuestro estudio sobre la formación de los planetas nos dice que los situados alrededor de esas estrellas enanas ultrafrías serían astros del tamaño de la Tierra y recibirían la misma cantidad de radiación”.
El propósito de CHeops –CHaracterising ExOPlanet Satellite, por sus siglas en inglés, la misión para la caracterización de exoplanetas de la Agencia Espacial Europea– es medir el tamaño de aquellos con masas medidas, mientras que Saint-Exupéry preselecciona la muestra de los que podrían detectarse desde la Tierra para optimizar las observaciones del CHeops.
Debido a la pandemia del COVID-19 “ha tenido que cerrar el Observatorio, aunque cuenta con una instalación remota y robótica que permite a los estudiosos operar desde casa vía Internet, dado que se cuenta con cámaras dentro y fuera de la estación meteorológica”, concluyó Gómez Maqueo Chew.
BTM