México.- México cuenta hoy con la primera bolsa 100 por ciento hidrosoluble y composteable, pues en dos minutos se desintegra al entrar en contacto con agua caliente y después puede incorporarse a los ecosistemas sin causar impactos negativos.
El bioplástico fue desarrollado con BeNat, una tecnología que permite usar almidones vegetales como materia prima y reduce los problemas de contaminación en el entorno. “El uso de materiales orgánicos permiten la desintegración de la bolsa en menos de 180 días, de ahí que lo pueden usar como composta e impactar de manera positiva a la flora y la fauna de nuestro país”, acentuó Francisco Santamaría, vocero de la marca.
En el mar el plástico ecológico tiende a convertirse en un tipo de gelatina y esto evita ahogar a los peces en caso de ingesta.“Para ambos ecosistemas se tienen grandes ventajas, al tener ahorros significativos, mejor salud y una armonía ambiental”, enfatizó.
De ahí la relevancia de la tecnología BeNat para diseñar productos amigables con el medio ambiente. “Estamos seguros que la innovación será líder en el corto plazo y dentro de un nuevo mercado con potencial de crecimiento”, resaltó.
Subrayó que las bolsas hidrosolubles son el primer producto compostable con certificación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) de Jalisco, y destacó que esa ventaja va en sintonía con la normativa de prohibición de plásticos que entró en vigor en 2020.
Si bien los atributos de la bolsa van enfocados a beneficiar al medio ambiente ésta es también resistente, elástica, indeformable y soporta hasta 15 kilogramos. “Son características que permiten su utilización en la mayoría de las necesidades de carga ligera de los usuarios”, acotó el experto.